El ácido sulfúrico es un líquido denso, aceitoso y muy corrosivo.
Es el compuesto químico que más se produce en el mundo debido a sus amplias aplicaciones.
Este producto químico industrial tiene tres características principales por las cuáles su uso es tan amplio:
Actúa como ácido: Es un ácido diprótico que en disolución forma dos iones, el hidrogenosulfato y el ion sulfato. Normalmente se usará el ácido diluido para realizar esta función.
Es oxidante: Actúa como tal, reduciéndose a dióxido de azufre. De este modo puede disolver metales como el cobre, plomo, etc. Sin embargo no ataca a metales nobles como el oro o el platino. Para aumentar su poder oxidante se debe usar concentrado y caliente.
Es deshidratante: El ácido sulfúrico tiene una fuerte acción deshidratante y no sólo extrae el agua de las sustancias químicas y de los tejidos animales y vegetales, sino que por contacto directo causa la destrucción de éstos; además de sustancias como azúcares, papel y fibras textiles vegetales. Es por esto por lo que se utiliza para desecar sustancias. Normalmente se usará el concentrado.
Principales aplicaciones del ácido sulfúrico
Regulación del pH en diversas fabricaciones de productos tanto orgánicos como inorgánicos.
Industria metalúrgica.
Ácido para baterías (diluido), en este caso se utiliza el Ácido sulfúrico al 40%.
Fabricación de fertilizantes (ácido concentrado).
Fabricación de pigmentos.
Tratamiento de aguas así como depuración de aguas residual.
Refinado de aceites y grasas.
Las diferentes concentraciones en las que puede encontrarse el ácido sulfúrico son: 36%, 40%, 50%, 70%, 98% y 98% químicamente puro.