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6 puntos clave para el mantenimiento de la piscina

6 puntos clave para el mantenimiento de la piscina

Queremos que el mantenimiento de la piscina te ocupe poco tiempo y así puedas disfrutar más de ella. Por eso, hemos confeccionado una serie de artículos en nuestro blog para explicarte todo lo relacionado con este tema de manera rápida y sencilla.

1. Funcionamiento del ciclo de agua

El ciclo del agua en una piscina se lleva a cabo a través del motor, las boquillas de propulsión, los skimmers, el sumidero, la toma de aspiración, la válvula reguladora y la válvula rotatoria, cada uno de ellos cumpliendo una función específica en el proceso. Para el mantenimiento de la piscina es importante limpiar con regularidad el prefiltro y el cesto de los skimmers, así como programar el funcionamiento del motor según las necesidades de uso y temporada.

El mantenimiento del agua de una piscina es fundamental para su correcto uso, por lo que es importante conocer cómo funcionan los sistemas de filtración, en nuestro artículo te explicamos todo lo que tienes que saber sobre esto. La bomba de filtrado es el elemento clave en este sistema, que hace pasar el agua por un filtro donde se retienen todo tipo de impurezas, como cabellos, polvo, insectos, cremas y algas. En el mercado existen tres tipos de elementos filtrantes, que se limpian mediante un proceso de contralavado o lavado a contracorriente:

  • Arena de sílice.
  • Arena de vidrio.
  • Tierra de diatomea.

Cualquier mantenimiento de la piscina se hace mediante productos, y para ello te puede ser importante conocer las medidas de tu piscina. También puedes consultar nuestra calculadora de litros de la piscina.

2. Actuación de los productos químicos en la piscina

¿Sabes cómo actúan los productos químicos en el agua de tu piscina? En nuestro artículo te lo contamos. Aquí tienes un breve resumen:

La desinfección del agua es un proceso en el cual se eliminan los gérmenes y se pueden utilizar cuatro tipos de productos: cloro, bromo, oxígeno activo y sal.

El cloro es un gas que, al mezclarse con el agua, forma ácido hipocloroso, eliminando mediante oxidación las bacterias y materias orgánicas en el agua. Existen diferentes tipos de cloro en el mercado como ellíquido o hipoclorito de sodio, el dicloro y el tricloro. Hay que tener en cuenta que el cloro, en contacto con compuestos nitrogenados, origina cloroaminas, por lo que el tipo de cloro a utilizar debe ser elegido cuidadosamente.

El bromo es más eficaz que el cloro, pero también más costoso.

El oxígeno líquido oxida la contaminación orgánica sin producir productos combinados irritantes.

La sal (NaCl) se usa en piscinas equipadas con un electrolizador de sal para la cloración salina, que desinfecta el agua de la piscina mediante la separación del cloro del sodio. La calidad de la sal es importante, y se debe elegir una sal pura fabricada especialmente para esta función. La cloración salina es compatible con otros sistemas de desinfección del agua y productos químicos.

Además de estos, hay otros productos muy recomendables que describimos en el artículo:

El hipoclorito de calcio, también conocido como "cal clorada", es eficaz contra bacterias, algas, moho, hongos y microorganismos peligrosos para la salud humana. Al reaccionar con el agua, forma ácido hipocloroso (desinfectante) e hidróxido de calcio, que puede aumentar el pH.

Para mantener el agua de la piscina químicamente equilibrada, se utilizan incrementadoresminoradores de pH. Mantener el pH dentro de la zona correcta es clave para el mantenimiento correcto de la piscina. Tienes más información sobre cómo controlar el pH de tu piscina en nuestros artículos.

Para evitar la proliferación de algas en el agua templada, se recomienda usar un antialgas periódicamente, lo que también refuerza la acción de los desinfectantes. El antialgas choque se usa cuando las algas ya están en proceso de formación, y se puede combinar con un producto de recuperación rápida del agua. Te explicamos con un poco más sobre cómo quitar las algas del fondo de tu piscina en otro artículo.

El floculante coagula las impurezas presentes en el agua, haciendo que se precipiten al fondo de la piscina en forma de flóculos gelatinosos. Para eliminarlos definitivamente, es necesario pasar el limpiafondos, dejando el agua transparente.

3. Sistema de mantenimiento

Descubrirás que hay muchas opciones de sistemas de mantenimiento para tu piscina, con sus ventajas e inconvenientes. Aquí te los resumimos:

  • Oxígeno: La forma más limpia, sana y ecológica de mantener el agua de la piscina limpia y transparente. Es un producto no clorado, no irrita los ojos y no reseca la piel ni el pelo. Pero es volátil y puede necesitar complementos como antialgas y lámparas ultravioletas en ciertas circunstancias.
  • Bromo: no tiene el olor característico del Cloro, ni sus estabilizantes y es ideal para piscinas cerradas, jacuzzis, spas, agua caliente, temperaturas elevadas, etc.
  • Sal: Se utiliza en piscinas que generan la desinfección del agua a través de la electrólisis de cloración salina. Es duradero y no irrita.
  • Cloro: Es el más utilizado, pero puede producir el típico olor a cloro o lejía y provoca la aparición de residuos
  • Hipoclorito cálcico: Uno de los desinfectantes más eficientes para el tratamiento y desinfección de agua del mercado. Es muy estable y desinfecta de forma instantánea, pero es un producto corrosivo.

4. Parámetros

Conoce en profundidad cuáles son los parámetros de la piscina para que puedas controlar muchos mejor su buen estado. Un pequeño resumen de algunos de estos conceptos:

  • pH: Valor que indica si una sustancia es ácida o básica. En el caso del agua de piscina, se recomienda que el pH oscile entre valores de 7,2 y 7,6 para evitar problemas como la turbidez del agua, la disminución del poder desinfectante de los productos clorados y las irritaciones a los bañistas.
  • Ácido cianúrico: Estabilizador del cloro que aumenta su permanencia frente a la radiación solar, pero que se acumula en el agua disminuyendo la capacidad desinfectante del cloro. Se recomienda controlar su concentración porque puede hacer que el cloro añadido a la piscina sea inútil. La única forma de eliminar el ácido cianúrico es renovar el agua y se recomienda que sus niveles no superen las 75 ppm.
  • Dureza: Se refiere a la cantidad de sales de calcio y magnesio disueltas en el agua. Un valor ideal oscila entre 150 y 250 ppm, ya que un agua excesivamente dura puede provocar incrustaciones calcáreas, aguas turbias y perjuicio para los circuitos del agua. Si la dureza es elevada, se puede reducir con un antical.
  • Alcalinidad: Indica la cantidad de sustancias alcalinas que existen en el agua, como carbonatos, bicarbonatos e hidróxidos. Una alcalinidad adecuada asegura un mejor control del pH y menos alteraciones en él. El valor ideal oscila entre 125 y 150 ppm. Para modificar la alcalinidad, se puede aumentar con un incrementador de alcalinidad y disminuir con un minorador de pH líquido clorhídrico.

5. Tareas de mantenimiento

¿No tienes claro cómo deberían de estructurarse las tareas de mantenimiento de la piscina? También te lo explicamos en nuestros artículos, de manera que seas lo más eficiente posible en esta tarea. Un breve resumen:

Para la puesta en marcha de la temporada, se recomienda comprobar el buen estado del equipamiento, limpiar las paredes y el suelo, realizar una cloración inicial de choque, analizar y ajustar el pH del agua, verter las dosis adecuadas de los productos elegidos y programar el reloj controlador del tiempo de filtrado diario.

Para el mantenimiento semanal, se recomienda analizar y ajustar el pH y nivel de desinfectante del agua, añadir una dosis de mantenimiento de antialgas, limpiar el agua de impurezas, limpiar los cestos de los skimmers y del prefiltro, añadir floculante si el agua está turbia y comprobar el grado de saturación del filtro.

6. Mantenimiento en invierno

Apostamos lo que sea a que no habías contemplado un tratamiento concreto para mantener la piscina en verano. Son muchos los propietarios primerizos que se olvidan de la piscina durante esta época del año, y es un error.

En nuestro artículo te explicamos cómo mantener la piscina en invierno. Aquí tienes un pequeño adelanto:

El primer paso es preparar la piscina para la hibernación, que implica limpiarla y tratarla con productos químicos como el oxígeno líquido o el cloro de choque granulado. Antes de aplicar el producto de invernaje, es importante que la temperatura de la piscina esté por debajo de los 15 °C, y que el pH esté entre 7,2 y 7,6.

El invernador es un componente esencial para el proceso de invernaje, ya que impide la acumulación de algas y bacterias durante la temporada de invierno. Se recomienda verter 5 litros por cada 50 m³, aplicándolo dos veces durante el invierno.

Para mantener la piscina en buen estado durante el invierno, se recomienda programar el motor para que funcione durante 30-60 minutos diarios y aplicar una mínima dosis de Cloro Multiacción. Además, es importante sacar las hojas y otros restos que caigan cada semana, evitar el uso de cobre y bajar el nivel del agua unos 20 cm.

Finalmente, se sugiere colocar una cobertura de protección de invierno o utilizar un objeto flotante en la superficie para amortiguar la presión del hielo en las heladas más duras y proteger el vaso de la piscina.

Esperamos que sigas nuestros consejos sobre mantenimiento de la piscina. Estamos seguros de que te serán útiles y obtendrás siempre lo mejor, siguiendo con nuestra filosofía enVadepiscinas.

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