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Bioestimulantes agrícolas, ¿ecológicos o químicos?

Bioestimulantes agrícolas, ¿ecológicos o químicos?

Los bioestimulantes agrícolas son conocidos por conseguir mejorar el crecimiento de las plantas, e impulsarlos a hacer que las cosechas sean más fructíferas. Esto también es perfectamente aplicable al mundo de la jardinería, donde se trabaja con pequeños huertos que, por lo que sea, no dan los resultados esperados.

Ya conocemos bien cuáles son los diferentes tipos de bioestimulantes para plantas, pero, ¿qué opción es mejor, químico o ecológico? Nuestra postura está muy clara: son mucho mejores los bioestimulantes ecológicos, y aquí encontrarás 10 razones:

1. Potenciación de los procesos naturales de las plantas

Los bioestimulantes ecológicos juegan un papel crucial al intensificar las funciones esenciales de las plantas, como la fotosíntesis y la respiración, de una forma totalmente natural.

2. Mejora en la absorción de los nutrientes

Al optar por estos productos para tu jardín, facilitas que tus plantas realicen sus procesos vitales de la manera más eficiente posible. Esto se traduce en plantas más saludables y fuertes, algo que las hace más capaces de absorber los nutrientes necesarios, consiguiendo que tu jardín se llene rápido de vida.

3. Reducción del estrés en las plantas

En momentos de adversidad, como durante heladas, sequías o ataques de plagas, los bioestimulantes son aliados indispensables.

Estos productos naturales ayudan a las plantas a superar dichas situaciones, permitiéndoles recuperar su vigor en poco tiempo.

Este efecto protector minimiza la necesidad de recurrir a tratamientos químicos para reparar los daños, lo cual hace que sea bueno tanto para las plantas como para el medio ambiente.

4. Fomento de un crecimiento saludable

Al emplear bioestimulantes ecológicos, cuidas de tus plantas, del suelo y del entorno donde crecen. Al estar compuestos por ingredientes naturales, estos productos enriquecen la calidad del suelo, consiguiendo que el ecosistema en tu jardín esté más equilibrado.

5. Menor necesidad de químicos

Como ya hemos dicho, la salud general de las plantas y la calidad del suelo mejoran, lo que reduce la dependencia de fertilizantes y pesticidas químicos para obtener resultados.

Vamos, que contribuye a la preservación del medio ambiente al evitar la contaminación del suelo y las aguas subterráneas. Además, representa un ahorro económico a largo plazo.

6. Influencia positiva en procesos metabólicos

Los bioestimulantes ecológicos ejercen un impacto en procesos metabólicos clave para la vida de las plantas, tales como la fotosíntesis, la respiración, la síntesis de ácidos nucleicos y la absorción de iones.

Esta influencia positiva asegura que las plantas puedan realizar sus funciones vitales de manera más eficaz, lo que se traduce en un desarrollo más robusto.

7. Mejora general de la calidad

Además de estimular el crecimiento, también tienen un efecto en la calidad de los cultivos. Consigue una mayor cantidad de producción, a la vez que mejora la calidad de las frutas, verduras y flores.

8. Ahorro de energía

Los bioestimulantes de este tipo, que contienen aminoácidos de origen generalextracto de algas, minimizan el gasto de energía por parte de las plantas para descomponer los abonos en busca de estos compuestos. Esto ayuda a que puedan destinar más recursos a su crecimiento.

9. Crecimiento en etapas críticas

En momentos críticos como la floración, el cuajado de frutos y después de los trasplantes, esto es más valioso que nunca. Al estimular el crecimiento en estas fases, aseguran el éxito de la planta en etapas donde es más vulnerable.

10. Optimización de los biofertilizantes

Mejora la eficacia de los biofertilizantes, multiplicando su acción. Esto se traduce en un mejor aprovechamiento de estos productos naturales, lo que contribuye a su crecimiento, de nuevo.

Como ves, los bioestimulantes ecológicos consiguen muchísimas sinergias naturales que son difíciles de sustituir con un bioestimulante de origen químico.

Nuestros bioestimulantes ecológicos

Aunque entendemos y respetamos que los bioestimulantes de origen químico puedan tener cabida en el mundo de la jardinería o la agricultura para algunas aplicaciones, creemos que los ecológicos pueden ser una opción mucho mejor a nivel general.

Estos son los bioestimulantes ecológicos que recomendamos:

  • Aminoácidos de origen vegetal al 40 %: Contienen nitrógeno orgánico y altos niveles de aminoácidos libres. Son 100 % de origen vegetal, y tienen un contenido relativamente bajo de aminoácidos, adecuados para el mantenimiento.
  • Aminoácidos de origen vegetal al 75 %: Una versión más concentrada de aminoácidos, ideal para momentos en los que la planta necesita un empujón extra en algún momento crítico. Sí, se puede usar en agricultura ecológica.
  • Extracto de algas: Producto soluble en agua que se aplica fácilmente, extraído a partir de unas algas especiales que crecen en Irlanda, y aporta más biodisponibilidad para la planta, entre muchas otras ventajas.

Todos estos productos suponen una ventaja para ti a la hora de tener un jardín o huerto que es tratado con productos de origen 100 % natural, sin químicos y respetando las necesidades de las plantas.

Si buscas bioestimulantes agrícolas, ya sabes: enVadecultivo encontrarás todo lo que necesitas. En caso de duda, pregúntanos y te diremos qué producto te puede ir mejor.

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