¿Conoces la utilidad de los antiespumantes para alimentos? En este artículo de Vadefood queremos ayudarte a descubrir este añadido que resultará tan útil en tus preparaciones. Te explicaremos de qué se trata, para qué sirve, en qué alimentos suele aplicarse y dónde lo podrás encontrar.
El antiespumante, como vimos en un artículo anterior en nuestro blog principal, es un componente que resulta indispensable en muchos procesos industriales y que consiste en eliminar la espuma existente del producto.
En el caso de los aditivos alimentarios, existe el antiespumante alimentario, también conocido como E900.
Como es natural, la inclusión de antiespumantes entre los ingredientes de una preparación puede ayudar a combatir la espuma del producto final, una vez se aplica. Esto aporta ciertas ventajas estéticas que hacen al producto mucho más atractivo a ojos del consumidor final.
Puede parecer algo secundario, pero sin duda puede suponer una ventaja competitiva cuando una persona está decidiéndose entre comprar un producto más barato de marca blanca u otro que, según la tipología, puede llegar a costar hasta 4 veces más. Los alimentos entran por los ojos y, al fin y al cabo, la decisión de compra depende de estos factores.
Es más: la presencia de espuma puede afectar gravemente a la experiencia, afectando incluso a la textura final del producto y la evaluación que se puede hacer sobre su calidad.
Más allá del factor comercial, la presencia excesiva de espuma puede resultar contraproducente a la hora de realizar ciertos procesos de fabricación, ya que puede interferir en:
Dicho todo esto, ¿qué alimentos son compatibles con el uso de antiespumantes? Lo vemos a continuación.
Las posibilidades del antiespumante para alimentos pueden verse en muchas preparaciones, como por ejemplo:
Hay diferentes sustancias que hoy en día se usan como antiespumantes, que suelen consistir en un emulsionante y una sustancia activa que revienta las burbujas:
Si bien es cierto que hay otros compuestos que pueden emplearse como antiespumantes, lo cierto es que estos son los de uso actual más recomendables. Además, estos productos permiten la aplicación mucho más sencilla de agentes de recubrimiento, algo necesario por ejemplo en vinos, zumos de frutas, mermeladas, licores o aceites, entre otros.
De hecho, el antiespumante de silicona ha sido evaluado numerosas veces y es uno de los más recientes aprobados por la JECFA (Comité de Expertos sobre Aditivos Alimentarios y Contaminantes de la OMS y FAO).
Esperamos que en este artículo sobre antiespumantes para alimentos hayas salido de dudas. Recuerda que en nuestra tienda encontrarás todo lo más recomendable para que tus preparaciones salgan lo mejor posible, ¡aprovecha la calidad de nuestros productos para destacar sobre la competencia!