Es posible que la cal apagada sea un producto que pueda interesarte si quieres aprovechar sus propiedades en tu sector. Hoy en Vadequímica te explicamos todo lo que debes saber para averiguar si te puede ser útil, siendo consciente de su versatilidad y su uso en diferentes industrias.
La cal apagada, también conocida como hidróxido de calcio y de fórmula química Ca(OH)2, es un polvo básico cristalino y blanco. En la jerga química, también puede ser conocido como cal muerta, cal hidratada, dihidróxido de calcio, blanquear o agua de lima.
Es soluble en agua y, aunque es higroscópico (absorbe agua del medio ambiente), no se disuelve completamente (ni en agua ni en alcohol), formando, en cambio, una suspensión que, con el tiempo, se separa. Esto lo hace útil en su uso en la eliminación de impurezas en el tratamiento de agua potable y aguas residuales.
La cal apagada es apreciada por sus diversas propiedades y aplicaciones industriales. Destaca por sus reacciones químicas, como la formación de carbonato de calcio útil en la construcción y la agricultura, y su capacidad para neutralizar sustancias. Como absorbente de humedad, es excelente para la preservación de alimentos y en cosméticos.
En la construcción, es crucial para producir mortero y yeso, mientras que en agricultura ayuda a modificar la acidez del suelo. Su carácter no tóxico y no combustible asegura seguridad en sus diversas aplicaciones.
El hidróxido de calcio se consigue mediante la hidratación del óxido de calcio (tal como dice su nombre), también conocido como cal viva.
Este proceso se lleva a cabo en equipos llamados hidratadores y se puede representar mediante la siguiente ecuación química: CaO + H2O = Ca(OH)2.
Aunque parece un proceso sencillo, requiere de un cuidado extremo debido a la naturaleza cáustica del hidróxido de calcio.
Las propiedades de este componente lo hacen muy útil en diferentes sectores. Nuestra cal apagada la han comprado diversos clientes para aplicarla en su sector, quizás podrías aprovecharla tú también:
El hidróxido de calcio es un componente crucial en el tratamiento de aguas residuales, pues participa en la neutralización, la floculación y la precipitación de metales pesados.
Además, se utiliza para purificar, ablandar y eliminar impurezas en el agua potable, lo que mejora su calidad para el consumo humano.
Como apunte, en el ámbito de la protección ambiental, también se emplea en la remineralización de agua desalinizada, la depuración de gases y el tratamiento de residuos y suelos contaminados.
En la industria metalúrgica, se utiliza en la producción de magnesio, especialmente en el proceso electrolítico.
La industria química también hace uso de la cal apagada, ya sea en la fabricación de pesticidas, en la neutralización de ácidos residuales, como aditivo en la industria petrolera o en la producción de aditivos para el petróleo crudo, entre otros.
En la industria alimentaria, la cal apagada tiene varios usos:
Se utiliza como:
Además de todo esto, la cal apagada también está presente en la preparación del caldo bordelés para neutralizar la acidez de la disolución de sulfato de cobre, que podría dañar las hojas y tallos de las plantas.
Donde tiene un mayor protagonismo es en el ámbito médico y odontológico. Resulta esencial en la fabricación de cementos y rellenos de cavidades dentales.
En la industria de la construcción, la cal apagada se emplea en la reparación de piscinas y en la estabilización de suelos para mejorar las propiedades de los suelos arcillosos.
Además, se utiliza como agente blanqueador gracias a su color blanco intenso. De hecho, desde hace muchos años ha ayudado en los hogares a blanquear paredes y techos.
En caso de que creas que puede serte útil la cal apagada o hidróxido de calcio, en Vadequímica te animamos a probarla para aprovecharte de sus propiedades durante la fabricación de tus productos, ¡seguro que te da muy buenos resultados!